Wednesday, September 28, 2011

Logica inversa

Para aprender a tocar un instrumento, primero tiene que aprender muy bien a tocarlo muy mal.

Para aumentar la numero de exitos, solamente tiene que aumentar el numero de rechazos y mantener las proporciones constantes

Tuesday, September 20, 2011

Lo que tiene que hacer



Frecuentemente me encuentro ante una situación en la que otra persona (a mi modo de ver) está mal, necesita ayuda, o simplemente está haciendo algo de una manera diferente a como yo lo haría. En estos casos, surge en mi algo que una buena amiga recientemente llamo “tono papá”, y es donde yo empiezo a decirle a las personas "lo que tienen que hacer".

Por ejemplo: Su perrita se murió después de 8 años de estar con usted. Usted está en duelo.  Si lo veo en este momento, muy seguramente le voy a decir que “lo que tiene que hacer” es "dejarla ir", que “esa es la naturaleza de la vida”, “que los seres llegan y se van”, que “hay que aprender  a perder a los seres queridos”, todos estos consejos muy de acuerdo con con mi realidad y con mi manera de ver el mundo. Sin embargo, USTED ESTÁ EN DUELO! Y esto cambia toda perspectiva, y toda interpretación de cualquier mensaje que se quiera dar.

Creo que nadie se merece que, bajo ninguna circunstancia,  le digan lo que tiene que hacer.  Cada persona es un mundo aparte, con procesos diferentes, tiempos y espacios diferentes, y nuestra racionalidad limitada nunca nos va a permitir ver completamente lo que el otro está sintiendo, entonces, si no podemos entenderlo por completo, si no podemos diagnosticarlo, como vamos a prescribirle lo que su alma necesita?  Sería como el médico que receta pastillas con solo saber la temperatura o la presión arterial  y nada más.  Palabras como “deberías hacer”, “lo que tiene que hacer es… “, “lo mejor sería que…” resultan ser tan volátiles y carentes de significado como las opiniones mismas.  Terminan siendo una auto adulación a nuestro ego, para hacernos ver como maestros cuando no lo somos.

Entonces que queda? pues ser enfermeros en vez de médicos.  Abrazar en vez de dar la mano. Escuchar en vez de hablar, cuidar en vez de recetar, y atender en vez de ser atendido.